Om nom nom nom

Próxima sección de Dejame: "Textos con un cierto grado de alcohol en la sangre"

Es ahora o más tarde.
La destrucción es inevitable.

Tal vez con pensar no hagas nada. Se necesita un complemento. Porque si no hay razonamiento, a base de suposiciones no llegamos a ningún lado.

Pensar en nada

En serio, no cuesta nada. Es como el aire: sin costo. No pagás ni 2 pesos. Hacelo, dale. Nos beneficiamos los dos. Pensar es gratis.

Yo.

No sé cómo se metían en mi cabeza. Daban muchas vueltas. Creo que por los oídos eran susurros y por los ojos imágenes. Todo se traducía en palabras. Emanaban de mi boca en un centenar de oraciones, algunas con sentidos y otras sin. Mis dedos las tipeaban con total elegancia, nunca en un ambiente hostil.
Pero no era, ni el momento, ni el lugar para ellas.
Ya llegará ese minuto.

Vos

¿Qué es lo que nos une? ¿Una conexión? ¿Una telepatía? ¿Un beso? ¿Un abrazo?
¿Una foto?
Sin dudas en un sinfin de cosas las que nos unen. Estamos sintonizando desde aquellas pequeñas casualidades que sucedían en un principio hasta las grandes causalidades de ahora. Desde aquel "¿Quién sos" hasta el último beso que nos dimos. Desde aquellas palabras que nos decíamos hasta los últimos abrazos.
Por todo eso es que estamos unidos. Sería muy redundante citar tantos textos escritos, pero sí, sos mi musa. La única. La de siempre. Vos.

El momento exacto de esa escena. ¿Recordás dónde estaban tus manos y dónde las mías? ¿Recordás la posición de nuestras caras?

La recreación perfecta